El impacto del Ingreso Mínimo Vital (IMV) ha alcanzado a la mitad de las familias previstas hace dos años.

En concreto, esta cobertura alcanza a 426.000 núcleos familiares. El IMV acumula 1,7 millones de solicitudes, una cifra que se ha elevado a raíz de la crisis humanitaria más grave acometida en Europa por la crisis de Ucrania. Desde la Asociación Estatal de Gerentes y Directores de Servicios Sociales critican que la tela de araña burocrática priva el acceso a las familias necesitadas. El primer motivo por el que la mitad de solicitudes son rechazadas. "Las cuantías son tremendamente exigentes y piden la renta del año previo". El segundo motivo de queja de los trabajadores sociales se centra en el patrón de movimiento de las personas excluidas socialmente. Para pedir el IMV, uno de los requisitos es que la unidad familiar es estar asentados como hogar en un mismo sitio en los seis meses previos. Este factor dentro del "laberinto burocrático" supone un 10% de las solicitudes rechazadas. En este sentido, solicitaron exceptuar este requisito para aquellos que huyen de la guerra.

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